Otra caverna

poema caverna

Salir de la caverna
en pleno cenit
puede confundir a cualquiera,
que entre su impaciencia
prefiere la oscura peña;
en lo umbrío,
el tacto, en su cabeza
moldea como anhela
que esa peña entre sus espacios,
luzca y sea.

Hermético luce el avenir
con lo que afuera se encuentra,
pues el pasado
le implora que a el vuelva
y sobre el sobrevuele la esfera…
El pasado apremia.

Las pestañas separadas no marcan diferencia,
la cegués de un segundo
en tanto la bruma se disuelva
no asegura que tras de ella aparezca
un mundo mejor al que ahora se presencia.

¡Todo eso se piensa!
y de ahí que los ojos no vean,
no se separen las pestañas,
pues el miedo una vez más
es quien gobierna las entrañas…
seguridad unos llaman.

La espalda hacia el orbe:
en su inmensidad
se extravían las razones
y en muchas ocasiones
lo que se encuentra
son contradicciones.

Algunos salen:
debido al fulgor que los ciega
agachan sus cabezas,
al pasar el encandilamiento
no las alzan,
se quedan jugando con las piedras,
una a una formando una vez más
una pequeña caverna,
gritando ¡estúpido!
a quien no se resguarda en ella…
el de afuera avanza.

Plata

critica

Plata, plata, plata...
otra vez invadiendo mi mente
falsas ideas me poseen
y escupen la falacia
que sin ella no sería nada
cuando me he sentido todo,
pleno limpio o cubierto de lodo
y lo más importante
ante todo yo.

Mas ahora solo atiendo
a este vulgar pensamiento.

Plata, plata, plata...




Anonymous, Refritos en el Momento Justo y "Revolución"

actualidad

Mucho de lo expuesto a la "luz" por el grupo de ciberactivistas Anonymous eran secretos a voces, especulaciones de siempre, cosas ya bien sabidas, teorías conspiranoicas que ahora con su firma toman un poco más de forma y relevancia, antes dejadas en el olvido.

Todo este popurrí de noticias escandalosas y elevadas a otros niveles gracias a la colaboración de los cibernautas y su imaginación adquiere un tono mucho más desagradable, licencioso y alborotador en un momento de volatilidad previa debido al asesinato de una persona negra a manos (rodilla) de un policía, llegan en el momento adecuado para incendiar mucho más el ambiente, no es un incendio cualquiera, es justificado, pero sin esa gasolina proporcionada por este "grupo" la cerilla que inicio todo tal vez no hubiera sido suficiente para sobrevivir una leve brisa, se supo bajo este método concentrar la indignación de un pueblo ya irritado pero resignado ante escenas similares por ser el pan de cada día en un país claramente violento, que desde hace mucho vive luchas en las sombras por lo que ahora es tan visible.

Personas de todo tipo son conscientes de los atropellos por las autodenominadas autoridades en todo el mundo, pero no viven de cerca ni los atropellos ni la lucha constante de otros para que se haga justicia y eso cambie de una vez por todas o siquiera progresivamente, estas personas estarían de acuerdo con estos cambios pues reconocen su necesidad para hacer de su entorno un lugar más justo, tienen pensamiento revolucionario, pero no ejercen, no más allá de las pantallas y muchas ni siquiera se toman la molestia de compartir su opinión a un mundo de desconocidos, tal vez sean partícipes en su momento de movilizaciones puntuales que reclaman un cambio en esa tan extensa lista de injusticias, quizás ni siquiera salgan a las calles por creer que su presencia no marcaría la diferencia para que algo cambiase o a pesar de ser conscientes la causa no los motiva lo suficiente para hacer algo al respecto, solo apoyan con el corazón, y ¿para qué sirve un revolucionario pasivo? para nada. En tanto los restantes ejercen, son instrumentos de algún bando o son semillas que nunca germinaran.

En días como los que vivimos algo ha motivado lo suficiente a las personas para dejar sus hogares y hacerse sentir tomando el espacio natural de los coches, en principio un sector puntual bajo histórica represión alzo la voz, luego un icono del nuevo mundo (el virtual) apareció para advertir que el evento alfa no era el único por el cual indignarse, notificando que liberaría "nueva información" con relación a los círculos influyentes y sus atropellos sobre otros grupos sociales, no importa que hubiese compartido acerca de todos esos personajes posicionados en las altas esferas, ya habían logrado algo mucho más importante: indignación y contagiado la irá suficiente para que muchas personas encontraran un motivo para salir. Misma estrategia se ha usado desde siempre por los actores influyentes de nuestra realidad política con la ventaja que ellos mismos están vinculados con los medios masivos y poseen facilidad de difusión.

Una especie de revolución se vive en este instante, con algunos de los pasivos, instrumentos y los siempre revolucionarios en las calles, gracias a un fenómeno simple que los unió: indignación, exaltación desembocada en furia por la idea o seguridad que tienen, que el agente opresor ha ido demasiado lejos; constantemente se tiene la certeza de todas las brutalidades y crueles acciones de este agente opresor, pero el conformismo presente por la creencia de no afectarnos al punto de influir directamente en nuestro diario vivir hace que desdeñemos dichos actos violentos, sin embargo el germen indignante ha contagiado a la masa al punto de parecer que la indiferencia ha desaparecido, todo gracias a alimentar este germen suministrándole suplementos vitamínicos: un estandarte o símbolo de la brutalidad que acosa, un eslogan, y ante todo el bombardeo con los recuerdos olvidados del por qué se está reclamando con condimentos refrescantes e igualmente indignantes, todo en cuestión horas pues se tiene que acudir a las emociones de muchos para que sea posible una movilización masiva, estallo y puede que el estallido este en su consumación o principios, o tal vez la onda expansiva haga que estalle asuntos volátiles a su alrededor, no sé puede decir con certeza qué ocurrirá, simplemente de esto se aprende que la revolución se tiene que alimentar...



Sin motivos

escape

He perdido nuevamente las ganas de vivir, las ganas de seguir, o estar en ese continuo punto en el que ya fue y sera, tal vez ya morí feliz, pero sigo sin querer llegar allí, ahora quiero acabar todo en este instante de tristeza... de quietud, que en mí se manifiesta. 

El sin animo se apodera de mí y mis horas pasan llenas de quejas, y risas por el sin sentido que me invade, ¿para qué? ¿por qué? Nunca fue mi culpa que las cosas se pusieran de cabeza, que el rumbo se disipara por las tormentas de malas decisiones, o simplemente decisiones; pero también he decidido ¿no?, era más joven, qué sabía yo que afuera hiciera tanto frío, fuera tan peligroso, o aún peor, nada rigiera lo que sucede cruzando la puerta, vale todo, no hay justicia, ley ni humanidad, ni humanos, animales desclasificándose.  

Antes confiaba. Soy parte de esos especímenes que traicionan, mordemos la mano que nos da de comer, la que nos ama. Todos tienen motivos, sin sentido, los tienen, al menos los tienen, ¡no! por que tener celos de quien los tiene, es la espora por el aire, flotando por las maravillas de su mundo, sin saber que es suyo, sin saber que es.

Y quejándome me dije: ese es mi motivo, simplemente ser. No pedí leer esa página, ni que se mostraran tan patéticos, ni que conexiones se evidenciaran tan débiles, quiero flotar con vocación, ¿qué me ofrece este yo? solo reclamos, no hacer nada por el cambio, no puedo cambiar la órbita del mundo con un gran salto, ni juntos podríamos.

Viendo lo pequeños, el sin sentido y las razones, sigue sin haber motivos, no hay final feliz, que final feliz es terminar este reclamo y no saber si mañana podre darle una segunda etapa con otro matiz, quiero un final y soy incapaz, y mi comienzo no fue el de un sueño, fue el de una pesadilla, se me ha arrebatado en lo que creí, sabiendo que creer no es suficiente, creía que lograría algo, había tiempo, no habían grietas que ahogaran el espíritu, ¿qué digo? sí de ese fantasma carecemos... como yo de motivos.  

Sumas y restas

actualidad


No sé cómo te puedes permitir
el dejarte ir en el problema,
en el que solamente tú y tu conciencia
buscan respuestas
a este conflicto de pareja.

Dos suman, uno resta,
entre nosotros cero será,
en donde me pondré a su lado
para al menos ser una decimal
que espera a su pareja para poder sumar;
como el tiempo en números se representa
uno a uno a dos se llega,
y es ahí donde no existe
matemáticas ni ciencia.

El amor no es perfecto;
¿en los ceros tiempo?
¡no!
un abrazo fuerte y un beso
que rose los momentos, y en este nuevo
no hayan reglas
y dos, uno sea,
el cero no exista y todo se detenga.

Entre sumas y restas
habemos dos, habemos uno,
pero juntos somos incalculables
e infinitos o no,
hay respuestas.